(2Re 5, 1-15 / Sal 41; 42 / Lc 4, 24-30)

Ayer platicábamos cómo para acercarnos a la misericordia y al amor de Dios va ser necesario «descalzarnos», aceptar que el lugar que pisaremos será tierra sagrada y debemos evitar que la misma quede impura por nuestras negligencias ¿qué situaciones crees que debes cambiar para que Dios actúe libremente en tu vida?

Naaman era un hombre importante, un general del ejército de Siria, sin embargo, cuando escuchó de boca de una esclava de su esposa que podía encontrar la curación, yendo hacia el profeta Eliseo, se puso en camino… cuando la manera de curarse le parecía demasiado sencilla y se indignó, supo escuchar a sus criados que le abrieron los ojos.

Quien realmente busca va a estar al pendiente de todo aquello que le pueda conducir hacia aquello; hay quienes buscan y pareciera que no quieren encontrar nada, como los personajes del Evangelio que frente a su incapacidad de cambiar frente a Jesús prefieren despeñarlo, antes que dejarse confrontar por su mensaje.

Padre, te pedimos que nos concedas la humildad necesaria para no engañarnos con nuestra soberbia, estar abiertos para recibir tu gracia en nuestras Almaraz y generosos para compartir el amor que tú nos das con nuestros hermanos más necesitados. Que te busquemos y queramos encontrarte. Espíritu Santo fuente de toda luz, ilumínanos.

(P. JLSS)