(1Cor 1, 1-9 / Sal 144 / Mt 24, 42-59)

“Velen y estén preparados, porque no saben qué día va a venir su Señor.” ¿Cómo entiendes esa frase del Señor? Para quien no conoce a Jesús este tipo de frases pueden parecer amenazantes, para quienes hemos conocido el amor que Dios nos tiene, son una invitación para vivir correspondiendo al amor recibido.

Por ello siempre debemos estar atentos a nuestras motivaciones para seguir al Señor ¿de qué dependen? ¿De la mera costumbre? ¿Del miedo? ¿Por impulso de su amor? Obviamente que todos responderíamos teóricamente a la última opción, pero se trata de ahondar y revisar seriamente esto. Nuestro seguimiento debe nacer del amor que Dios nos ha dado y de su gracia.

Si prestamos atención al comienzo de la carta a los Corintios, notaremos cómo San Pablo les invita a perseverar en el amor: “El los hará permanecer irreprochables hasta el fin, hasta el día de su advenimiento. Dios es quien los ha llamado a la unión con su Hijo Jesucristo, y Dios es fiel.” Esto último jamás debemos olvidarlo, Dios nos ha llamado a su lado y Él es fiel.

Por eso hoy te pedimos Padre, que nos des la fortaleza para permanecer fieles a tu amor a pesar de cualquier cosa, que no nos dejemos distraer con tanta felicidad ni busquemos refugio en situaciones que estamos seguros de que nos roban la paz, recordemos que el Señor nos ha dado la paz por medio de su sangre derramada en la Cruz (Cf. Col 1, 20)

(P. JLSS)